El gobernador de Texas rechaza retirar las boyas del río Bravo pese a la orden del Gobierno federal
El gobernador de Texas, Greg Abbott, ha manifestado este lunes que no retirará la barrera de boyas instalada en del río Bravo, frontera con México, a pesar de la orden en ese sentido emitida por el Departamento de Justicia del Gobierno federal estadounidense.
"Texas utilizará plenamente su autoridad constitucional (estatal) para afrontar la crisis que habéis causado. Texas le verá en los tribunales, señor presidente", ha apuntado Abbott en una carta remitida al presidente estadounidense, Joe Biden en respuesta a la petición del Departamento de Justicia, emitida el pasado jueves.
En concreto, Abbott defiende "el derecho de Texas a la seguridad en la frontera", según la misiva, publicada en redes sociales. El gobernador texano cita varias sentencias judiciales y acusa a Biden de incumplir el Artículo 4 que recoge que el Gobierno "debe protegerlos (a los estados) frente a una invasión".
"Todo esto está pasando porque usted ha incumplido su obligación constitucional de defender a los estados de una invasión aplicando sinceramente la legislación federal", ha resaltado Abbott, que recuerda los "niveles récord de inmigración ilegal".
Abbott ha reprochado a Biden que "la política de fronteras abiertas anima a los migrantes a arriesgar sus vidas cruzando ilegalmente por el agua en lugar de hacerlo de forma segura y legal (...). Nadie se ahoga en un puente". Así, recuerda que la ONU designó la frontera entre Estados Unidos y México como "la frontera terrestre más mortífera" del mundo, con 728 muertes en 2021.
Así, Abbott insta a Biden a "ayudarme a salvar a los texanos y a todos los estadounidenses de drogas mortales como el fentanilo, de la violencia de los cárteles y de los horrores del tráfico de seres humanos", ha remachado.
La comunicación federal del jueves advierte a Texas de que retire la barrera antes del lunes a las 14.00 horas (hora de la Costa Este) o, de lo contrario, iniciará acciones legales.