El exministro de Información libanés se niega a retractarse de sus críticas a Arabia Saudí
El ya exministro de Información de Líbano George Kordahi se ha negado a retractarse de las críticas a Arabia Saudí al calificar de "agresión" su campaña militar en auxilio del Gobierno de Yemen que provocaron el boicot diplomático y económico de los países del Golfo al Gobierno de Beirut.
"Diría lo mismo porque creo que no ofendí a nadie y hablé de buena fe. En realidad, la campaña contra mi persona comenzó en Líbano. Si nadie me hubiera criticado en mi país, nadie se habría dado cuenta", ha declarado Kordahi a la televisión iraní Al Alam.
Las declaraciones de Kordahi, realizadas cuando todavía no era ministro, enfurecieron a los saudíes hasta el punto de liderar un boicot contra Líbano, país donde el partido milicia chií Hezbolá, enemigo de Riad, ejerce gran influencia. Hezbolá es además aliado de Irán, que a su vez auxilia a los insurgentes huthis enfrentados con el Gobierno yemení.
En medio de este maremágnum político y militar, el exministro declaró que fue obligado a dimitir y achacó esta orden a la debilidad económica y política que atraviesa el país, incapaz ahora mismo de resistir boicot alguno. Kordahi se enorgulleció de haber "aguantado presiones durante cuarenta días" antes de dimitir, también en parte, por amor a la patria".
El exministro insistió en que "no cambiaría una palabra" de lo que dijo entonces sobre la guerra de Yemen, un conflicto "entre árabes" y una "guerra de desgaste que debe terminar", según hizo saber durante la entrevista, recogida a su vez por la agencia semioficial de noticias Tasnim.