El bce se dispone a bajar los tipos y podría apuntar a nuevos recortes
Por Balazs Koranyi y Francesco Canepa
FRÁNCFORT, 12 dic (Reuters) - Es casi seguro que el Banco Central Europeo volverá a bajar los tipos de interés el jueves y dará señales de una mayor relajación en 2025, en un momento en que la inflación en la zona euro casi ha vuelto a su objetivo y la economía se ralentiza.
El BCE ya ha bajado los tipos en tres de sus últimas cuatro reuniones. Sin embargo, el debate se ha centrado en si está relajando su política monetaria lo suficientemente rápido como para apoyar a una economía que corre el riesgo de entrar en recesión y que se enfrenta a la inestabilidad política interna y a la perspectiva de una nueva guerra comercial con Estados Unidos.
Es posible que esta cuestión domine la reunión del jueves, pero es probable a la vez que los dirigentes más a favor de una política monetaria restrictiva, que aún cuentan con una cómoda mayoría en el Consejo de Gobierno de 26 miembros, respalden sólo un pequeño recorte de 25 puntos básicos, situando el tipo de referencia en el 3%.
Como forma de buscar un equilibrio con los responsables de política monetaria a favor de una mayor relajación, el recorte podría ir acompañado de ajustes en las orientaciones del BCE para dejar claro que la política monetaria seguirá relajándose siempre que no se produzcan nuevas perturbaciones en la inflación, que podría alcanzar el objetivo del 2% fijado por el banco central en el primer semestre de 2025.
"Los fundamentos justifican plenamente el recorte de diciembre y una orientación más a favor de los estímulos monetarios, dado el deterioro del panorama de crecimiento. Las presiones inflacionistas subyacentes se han atenuado y los riesgos de nuevos vientos en contra del crecimiento han aumentado tras los resultados de las elecciones estadounidenses", dijo Annalisa Piazza, de MFS Investment Management.
El recorte está justificado porque las nuevas proyecciones mostrarán que la inflación, por encima del objetivo desde hace tres años, volverá al 2% dentro de unos meses. Esto se debe en parte a que las economías de los 20 países que comparten el euro apenas crecen.
Las perspectivas están tan cargadas de riesgos que algunos dirigentes monetarios sostienen que el BCE corre ahora el riesgo de no alcanzar su objetivo de inflación, como hizo durante casi una década antes de la pandemia, y debería actuar con mayor rapidez para evitar quedarse atrás.
Pero los dirigentes de línea dura dicen que la inflación sigue siendo un riesgo dado el rápido crecimiento de los salarios y el rápido aumento del coste de los servicios, por lo que es apropiado un flujo constante de medidas graduales.
El proteccionismo estadounidense y la inestabilidad política en Francia y Alemania son otras razones para la cautela.
Los miembros del Consejo de Gobierno simplemente desconocen qué políticas aprobará el próximo Gobierno del presidente electo de EEUU, Donald Trump, cómo responderá Europa o cuál será su impacto económico.
La agitación política en Francia y las próximas elecciones en Alemania se suman a la incertidumbre y podrían obligar al BCE a intervenir, reforzando los argumentos de que debe dejarse espacio para tomar medidas audaces si es necesario.
sandra Horsfield, de Investec, afirma que "el riesgo de una crisis de confianza que podría llevar a una recesión mucho más pronunciada en Francia y propagarse por la zona euro a través de los vínculos comerciales ha aumentado inevitablemente".
"Mantener la pólvora seca ante tal eventualidad podría ser prudente. Además, un recorte drástico ahora podría avivar los recelos del mercado en lugar de aliviarlos", añadió.
SERIE DE RECORTES
Los mercados financieros han descontado totalmente un recorte de tipos de 25 puntos básicos el jueves y las probabilidades de una medida mayor se acercan ahora a cero, lo que supone un gran cambio respecto a hace unas semanas, cuando un recorte de medio punto porcentual se consideraba una posibilidad real.
Los inversores prevén un recorte en cada reunión hasta junio, seguido de al menos otro recorte en el segundo semestre de 2025, con lo que el tipo de depósito se situará en el 1,75% a finales de año.
Cualquier cambio en las orientaciones del BCE para el futuro será probablemente marginal.
El organismo podría abandonar su referencia a la necesidad de una política monetaria "restrictiva" para controlar la inflación, una señal implícita de que los tipos bajarán al menos hasta el llamado nivel neutral en el que no estimulan, ni frenan, la actividad económica.
El problema es que la neutralidad es un concepto indefinido y cada responsable de política monetaria tiene una estimación diferente, situando el rango entre el 1,75% y el 3%, con la mayoría viéndolo entre el 2% y el 2,5%.
Pero es probable que el BCE mantenga sus intenciones vagas después de haberse quemado repetidamente al asumir compromisos explícitos que resultaron difíciles o imposibles de cumplir.
"Dada la enorme incertidumbre geopolítica y política internacional, el enfoque 'dependiente de los datos y reunión por reunión para determinar el nivel y la duración adecuados de la restricción' sigue siendo apropiado", dijo Lorenzo Codogno, de LC Macro Advisors.
(Edición de Catherine Evans; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)
Temas
Otras noticias de Servicio-de-noticias
Más leídas
Doble crimen en Vicente López. “Es un monstruo que vivía dentro de casa”, el testimonio que hizo llorar al jurado
Tenía 42 años. Quién era Eduardo Vaccaro, el hombre que murió ahogado en los lagos de Palermo
Campeón de la Copa Argentina. Central Córdoba puso a Santiago del Estero en la Libertadores y dejó a Vélez hundido en los nervios y el caos
Una chance menos. Qué necesita Boca para clasificar a la Copa Libertadores 2025, tras el título de Central Córdoba en la Copa Argentina