El asesino en serie Michel Fourniret muere a los 79 años
El asesino en serie confeso Michel Fourniret ha muerto este lunes a la edad de 79 años en un hospital de París, al que días antes había sido trasladado debido a los problemas de salud que arrastra desde hacía ya varios meses.
Fourniret, apodado el 'Monstruo de las Árdenas', fue sentenciado a dos condenas de cadena perpetua en 2008 por el asesinato de siete jóvenes en Francia y Bélgica entre 1987 y 2003. Su esposa, Monique Olivier, fue condenda a 28 años de prisión al ser considerada cómplice de algunos de estos crímenes.
Antiguo obrero nacido en Sedán, en el norte de Francia, Fourniret estaba acusado de asesinato, violación y secuestro, hechos que admitió. Su esposa tuvo que responder de la acusación de coautora de uno de los crímenes, perpetrado en 1989, y de complicidad en otros cinco.
Ingresado el sábado de urgencia en el hospital parisino de Pitie Salpetriere, su situación durante el fin de semana ya fue calificada de "irreversible", por lo que el deceso era cuestión de horas.
Fourniret, quien sufría de problemas cardíacos y de degeneración mental --según ha podido saber el diario 'Le Parisien'--, ya fue brevemente ingresado el pasado mes de noviembre, cuando sufrió un desmayo en la celda de la prisión en la que había estado encerrado los últimos trece años.
La "pareja diabólica", tal y como les denominó la prensa francesa, fue arrestada en junio de 2003 en Bélgica, cuando una niña de 13 años a la que habían secuestrado logró escabullirse de la camioneta en la que había sido retenida y alertar a la Policía.
Fourniret fue condenado por primera vez en 1967 por agredir a una menor en las Árdenas, en el norte de Francia, de donde era originario. Sin embargo, jamás cumplió la pena de ocho meses que se le impuso. Ya en 1984 fue arrestado nuevamente y condenado a cinco años de prisión, después de confirmarse que había sido autor de una decena de agresiones sexuales desde 1981.
Ya en prisión, en noviembre de 2019, el asesino confeso fue objetivo de una nueva investigación contra él por la desaparición de Estelle Mouzin, una niña de 9 años en Guermantes, cerca de París, de la que años antes salió airoso. Sin embargo, ya en mayo de 2020, la Fiscalía gala confirma "su participación en los hechos", tras hallar contradicciones en la coartada y la versión de su esposa.