Control de armas podría complicar cumbre Biden-Putin
WASHINGTON (AP) — Las relaciones entre Estados Unidos y Rusia se encuentran en uno de sus peores momentos, pero el presidente estadounidense Joe Biden y su contraparte ruso Vladimir Putin están de acuerdo en por lo menos un tema: su encuentro cara a cara este miércoles es una oportunidad para iniciar una nueva era en el control de armas.
Ahora bien, si ello conduce a verdaderas negociaciones armamentistas es otro tema, complicado por el hecho de que ambas partes se acusan mutuamente de haber violado tratados anteriores.
La confianza ha estado disminuyendo en años recientes, especialmente luego que Estados Unidos y luego Rusia, en el 2019 abandonaron el Tratado para Armas Nucleares de Alcance Intermedio, que regía sobre una clase entera de misiles y estuvo vigentes por más de tres décadas.
El gobierno anterior en Estados Unidos, de Donald Trump, también se retiró del tratado de Cielos Abiertos, que permitía el sobrevuelo de las instalaciones militares de ambos países. El mes pasado, el gobierno actual de Washington, de Joe Biden, informó a Rusia que no renovaría el tratado, y la semana pasada Putin confirmó la salida de Rusia.
Biden y Putin ahora encaran el desafío de cómo y cuándo reanudar el diálogo sobre temas de armas, en momentos en que Biden enfrenta presiones del Congreso sobre cómo encarar el creciente poderío bélico de China y las ambiciones nucleares norcoreanas.
Pese a su importancia, el tema de control de armas podría resultar opacado en la cumbre, dada la prominencia que han cobrado temas como los ataques de ransomware, las acusaciones de injerencia rusa en las elecciones norteamericanas, las medidas militares rusas en la frontera con Ucrania y denuncias de que Kremlin estuvo detrás del hacking de SolarWinds.
Grupos entendidos en el tema le han pedido a Putin y Biden a iniciar negociaciones de control de armas mediante un diálogo de “estabilidad estratégica”, es decir, consultas de gobierno a gobierno diseñadas para revisar cualquier tema de desacuerdo en el área de seguridad nacional.
Abundan también los pedidos de que las conversaciones incluyan a Europa ya que cubrirían una amplia gama de temas como ciberataques, operaciones espaciales y defensas antimisiles, además de lo relacionado con armas nucleares.
Funcionarios tanto de Moscú como de Washington han indicado que aprecian el valor de negociaciones de estabilidad estratégica, que no serán de control de armas sino discusiones de funcionarios de menor nivel con la idea de priorizar los temas para una eventual sesión de control de armas.
“Lo que estamos buscando es que los dos presidentes le den a sus equipos señales claras en cuanto a la estabilidad estratégica para que podamos lograr avances en el control de armas y otros temas nucleares para reducir las tensiones y la inestabilidad en ese aspecto de la relación”, declaró la semana pasada el asesor de seguridad de Biden, Jake Sullivan.