comienzan a cerrar las primeras mesas de votación en elecciones en chile
(Actualiza con cierre de mesas)
Por Carlos Serrano y Fabián Andrés Cambero
SANTIAGO, 21 nov (Reuters) - Los chilenos acudieron a votar masivamente el domingo en unas polarizadas elecciones presidenciales y legislativas donde las propuestas más extremas son las que parecen mejor posicionadas.
El sufragio marca el cierre de un período de dos años en los que el país vivió un estallido social, empezó a redactar una nueva Constitución y lidió con la pandemia del COVID-19.
Las mesas empezaron a funcionar desde primera hora y durante la jornada algunos locales presentaron largas filas debido a la cantidad de asistentes y las restricciones sanitarias, que limitaban el aforo.
A las 18.00 hora local (2100 GMT) empezaron a cerrar las mesas, que iniciarían automatizadamente el conteo electoral, lo que agilizaría la obtención de resultados. Pero en varios centros de votación a lo largo del país largas filas de electores esperaban su turno para votar, lo que podría retrasar los recuentos.
Con sombrero y lentes oscuros para evadir el inclemente sol primaveral, la técnico en enfermería Carmen Gloria Carrillo dijo en un local en el centro de Santiago que esperaba que la gente joven acudiera a votar.
"Si queremos que las cosas cambien creo que es importante que todos votemos", afirmó Carrillo, de 46 años.
Los sondeos previos auguraban una clara victoria en primera vuelta de la izquierda más radical encarnada por Gabriel Boric y la extrema derecha capitaneada por José Antonio Kast, que se disputarían el balotaje el 19 de diciembre.
De confirmarse el escenario, los chilenos darían carta de defunción -al menos temporal- a los dos bandos políticos que han regido sus destinos desde el retorno de la democracia en 1990: el legado centroizquierdista de la Concertación representado por Yasna Provoste y el actual oficialismo derechista abanderado por Sebastián Sichel.
El presidente Sebastián Piñera fue uno de los primeros en sufragar en un acomodado barrio del oriente de la capital y llamó a los ciudadanos a votar, asegurando que se han tomado las medidas sanitarias necesarias en medio de la pandemia.
"A los que sí sean elegidos y tengan que asumir el próximo 11 de marzo, que nunca se olviden de que han sido elegidos para estar al servicio de la gente", dijo el mandatario tras emitir su voto.
Los primeros conteos de votos en el exterior -con poco peso sobre el total nacional- arrojaban una victoria de Boric sobre los otros candidatos. Habitualmente el sufragio en el extranjero favorece a las tendencias más de izquierda.
"Los resultados que hemos obtenido hasta ahora son muy positivos, pero por cierto hay que tomarlos con humildad. No me confío y llamo a la gente a participar", dijo Boric al canal CNN Chile durante un recorrido por su natal Punta Arenas, en el extremo sur del país.
Boric, un exlíder estudiantil de 35 años, es señalado por muchos como el principal aspirante a La Moneda, al aglutinar en Apruebo Dignidad apoyos que van desde la centroizquierda al Partido Comunista, al que podría añadirse un voto de rechazo más transversal contra Kast si acaban midiéndose en el balotaje.
La existencia -según sondeos- de un 25% de indecisos hace que los analistas no terminen de descartar una posible remontada que lleve a Sichel o a Provoste a la segunda vuelta.
En Nueva Zelanda, el segundo lugar lo obtuvo el candidato virtual Franco Parisi, un mediático economista radicado en Estados Unidos que no pisó Chile durante todo el proceso y que asoma como tercera fuerza en algunos sondeos.
Por su parte, Kast dijo que lo principal es que las personas puedan concurrir a votar y pronunciarse en libertad.
"Hoy tenemos que guardar nuestras opiniones, dijimos todo lo que tenemos que decir y no va a cambiar el resultado de la elección", señaló luego de votar.
En la jornada también se escogen parlamentarios -los 155 miembros de la Cámara de Diputados y 27 de los que serán 50 senadores- y a consejeros regionales, conformando el tablero político para los próximos años, a la espera de los resultados del trabajo de la Convención Constitucional.
(Editado por Natalia Ramos y Gabriela Donoso)