Bruselas quiere obligar a autoridades y plataformas como Airbnb a llevar un registro de los pisos turísticos
La Comisión Europea ha presentado este lunes medidas para reforzar la transparencia en el negocio de alquiler de alojamientos de corta duración a través de plataformas como Airbnb o Boooking, por ejemplo obligando a las autoridades a llevar un registro de los propietarios y sus bienes y a los operadores, a vigilar que los pisos que muestran tienen un número de registro real.
La gran mayoría de Estados miembro cuentan ya con algún tipo de registro de este tipo de alojamientos turísticos a nivel local, regional o nacional, pero Bruselas cree que están demasiado fragmentados y advierte de que no hay un control exhaustivo sobre la información que reúnen.
Por ello, el Ejecutivo comunitario apuesta por armonizar a nivel europeo los requisitos de los diferentes registros, de modo que todos los propietarios --particulares o empresas-- con alojamientos disponibles informen de quiénes son con claridad, qué bienes tienen en alquiler turístico y dónde se encuentran. Estos registros deberán ser accesibles a través de Internet, ser fáciles de utilizar y asignar un número único de registro a cada propietario.
Además los números de registro deberán ser públicos y aparecer claramente junto a las propiedades en las plataformas, que serán las encargadas de verificar de manera aleatoria que los dueños se han registrado y comunican los registros correctos.
Fuentes comunitarias han aclarado que serán las autoridades nacionales las responsables de controlar que las partes cumplen con las nuevas normas y han recalcado que Bruselas invita a los Estados miembro a "prever sanciones para quienes no se lo tomen en serio y sepan así que pueden ser castigados si no cumplen".
En este contexto, la propuesta comunitaria, que debe ser aún negociada entre el Parlamento Europeo y los 27 para acordar su versión definitiva, señala que las autoridades públicas tendrán la posibilidad de suspender números de registro y pedir a las plataformas que eliminen a los anfitriones que no cumplan las normas.
Otra de las medidas apunta a "racionalizar" el intercambio de datos entre las plataformas 'online' y las autoridades públicas, de modo que de manera automatizada informen cada mes, por ejemplo, del número de noches alquiladas y del número de huéspedes alojados.
El Ejecutivo comunitario quiere también que los datos generados contribuyan, en forma agregada, a las estadísticas de turismo elaboradas por Eurostat y se incorporen al próximo espacio europeo de datos para el turismo.