Borrell pide mantener el apoyo a Ucrania pese a las "preocupantes" amenazas nucleares de Rusia
El Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Josep Borrell, ha pedido este miércoles mantener el apoyo a Ucrania pese a las "preocupantes" amenazas nucleares de Rusia, que presentan un escenario "temible" en el conflicto en el este de Europa.
En un discurso en el pleno del Parlamento Europeo en Estrasburgo, Francia, Borrell ha subrayado que la guerra en Ucrania entra en una "nueva fase" ante la retórica nuclear del Kremlin. "Estamos ante un escenario temible y no debemos cerrar los ojos, una potencia nuclear está retrocediendo en el escenario convencional y amenaza con usar el arma nuclear", ha expuesto.
Ante este panorama "preocupante", el jefe de la diplomacia comunitaria ha defendido que Europa debe demostrar que su apoyo a Kiev "no flaquea" y ha insistido en que la ayuda a Ucrania no es una cuestión de generosidad europea sino que el continente se juega su propia seguridad.
"Es una batalla por la libertad de los ucranianos y la nuestra", ha proclamado Borrell ante los eurodiputados. "Allí se decide nuestro futuro. No es el momento de dudar, la sociedad debe ser capaz de continuar esta lucha apoyando a Ucrania", ha destacado, para reiterar que los europeos deben saber que el precio a pagar "merece la pena".
Batalla de ideas con moscú
Sobre la situación en el terreno, el Alto Representante ha valorado los avances ucranianos con sus contraofensivas en varios frentes en el este y el sur, un éxito militar que ha atribuido a las "tácticas ágiles" del Ejército ucraniano.
"La guerra se puede ganar en el campo de batalla, pero sobre todo en el campo de las ideas", ha señalado, para alertar de que Europa debe contrarrestar la lucha que libra Moscú por "la supremacía de los valores".
Por ello ha abogado por hacer un ejercicio de diplomacia y extender el relato europeo para asegurarse de que terceros países tiene una percepción real de la guerra en Ucrania y de las consecuencias en la energía, los alimentos y los precios de la agresión rusa.