Arrancan los trabajos para construir un nuevo asentamiento en Cisjordania
La nueva colonia se construirá en un terreno adyacente a un pueblo palestino declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO
MADRID, 14 Ago. 2024 (Europa Press) -
El ministro de Finanzas de Israel, Bezalel Smotrich, ha anunciado este miércoles que han empezado los trabajos para la construcción de un nuevo asentamiento en la Cisjordania ocupada entre Gush Etzion, cerca de Jerusalén, y la ciudad palestina de Belén.
"Ninguna decisión antiisraelí o antisionista detendrá el desarrollo continuo de los asentamientos. Continuaremos luchando contra la peligrosa idea de un Estado palestino", ha señalado el ministro en un mensaje publicado en la red social X.
La Administración Civil ha publicado una línea divisoria para determinar la privacidad de las tierras que formarán parte del nuevo asentamiento, en total formado por 602 dunams, equivalentes a 60 hectáreas, según ha recogido el diario 'Haaretz'.
El nuevo asentamiento se construirá en un terreno adyacente al pueblo palestino de Battir, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) debido a sus terrazas escalonadas con olivares y viñas, así como otras plantaciones agrícolas.
El Gobierno de Israel anunció su intención de "reforzar" la política de asentamientos en Cisjordania en respuesta al reconocimiento "unilateral" del Estado palestino por parte de varios países europeos, entre ellos España.
Smotrich indicó a finales de junio que el gabinete del primer ministro Benjamin Netanyahu había aprobado legalizar cinco asentamientos en Cisjordania --entre ellos Nahal Heletz-- y adoptar sanciones contra la Autoridad Palestina, una medida aplaudida por parte de sus aliados ultraderechistas y ultraortodoxos.
El proceso, no obstante, puede tardar varios años en llevarse a cabo, ya que es necesario obtener los planes de zonificación y permisos de construcción correspondientes, según ha recogido el diario 'The Times of Israel'.
La ONG israelí Paz Ahora ha denunciado que el asentamiento tiene como objetivo "aislar" a cerca de 25.000 palestinos que viven en las aldeas al oeste de Belén y "convertirlos en un enclave dentro del territorio israelí impidiendo la posibilidad de establecer un Estado palestino en el futuro".
"Netanyahu y Smotrich continúan promoviendo la anexión 'de facto', ignoran la convención de la UNESCO de la que Israel es signatario, y todos pagaremos el precio", ha señalado en un comunicado, agregando que estas acciones conducirán "inevitablemente" a más fricciones en la región.
La Corte Internacional de Justicia (CIJ) estimó en julio que la política de asentamientos de Israel en los territorios palestinos ocupados es contraria a la Cuarta Convención de Ginebra sobre el desplazamiento forzado de personas.
Asimismo, determinó que estas políticas y prácticas de Israel están diseñadas para tener un "carácter indefinido" que provoca "efectos irreversibles" en los territorios ocupados, contrario por tanto "a la prohibición del uso de la fuerza en las relaciones internacionales y a la no adquisición de territorio por la fuerza".