Desde el exterior, la casa de Kristen Stewart (32), en Malibú, no parece diferente de las demás, con sus amplios ventanales y su diseño geométrico. El plano tampoco es nada extravagante: una construcción de 540 metros cuadrados de superficie, con cinco dormitorios y cinco baños, cocina equipada a full, un living con hogar y una terraza con una espectacular vista abierta de la playa. Lo que hace única a la propiedad de la actriz es la impronta que le puso a la decoración, repleta de fotos personales y arte. Enmarcada en la exclusiva Laguna Beach de Malibú, cada rincón tiene el sello de la protagonista de la película Spencer. En 2020 ella había intentado venderla por 9,5 millones de dólares, sin embargo, no consiguió comprador y decidió retirarla del mercado. La semana pasada volvió a ofrecerla, pero, en esta oportunidad, reduciendo su valor a 8,5 millones de dólares. Los que pudieron visitarla aseguran que es una buena oportunidad, y que los espacios que tiene al aire libre –como la terraza con el jacuzzi– son el lugar soñado para escuchar las olas o ver la puesta del sol.