“Cuando llegó Volta pudo dormir de corrido”, no descansaba ni podía salir a pasear hasta que una perra cambió su vida

El adolescente de 14 años fue diagnosticado con autismo al empezar el jardín, no caminaba por el barrio, quería que lo lleven en auto y se negaba a dormir en su cuarto. Pero Volta cambió su vida.

Cuando empezó la escuela, en el nivel inicial, Nicolas Meini, un adolescente que ya tiene14 años, fue diagnosticado con trastorno del espectro autista. Si bien la condición de TEA (abreviatura que se usa para referirse a esta condición del funcionamiento de las personas y que, en los últimos tiempos, comenzó a reemplazarse por CEA o condición del espectro autista) se estableció en un grado moderado algo les había quedado claro: el niño iba a necesitar una serie de apoyos para crecer y desarrollarse.

Los primeros indicios los advirtieron tanto la familia como los docentes del jardín. Ellos detectaron que Nico tenía comportamientos poco usuales para niños de su edad. “Cuando empezó el jardín, vimos que todos los chicos iban para un lado siguiendo a la señorita y Nico iba para el otro. Ya había pasado un mes desde que había empezado el jardín y no lográbamos que se quedara solo, siempre tenía que estar acompañado con un familiar”, recuerda Elizabeth, la mamá de Nico.

Entonces, la familia empezó a visitar pediatras, instituciones médicas y profesionales que ayudaron a definir el diagnóstico TEA del niño. “Cuando recibimos el diagnóstico de Nico, yo sentí que mi castillito se me caía encima. Pero recuerdo que en ese momento pensé que si, se me había caído el castillo encima pero a pesar de los golpes, de los escombros íbamos a construir una nueva casita. Y creo que a lo largo del tiempo lo fuimos haciendo.”, reflexiona Elizabeth.

Ya conociendo la situación comenzaron a implementar un calendario de actividades y terapias específicas para apoyar a las personas con autismo en su desarrollo. Nico recibió el diagnóstico a los 3 años recién cumplidos, terminó el jardín en el mismo lugar, hizo permanencia en salita de 5 y al comenzar el primer grado de la escuela primaria observaron que no se adaptaba a una escuela común sino que tenía otro tipo de necesidades. A partir de ese momento Nico fue a una escuela especial, adonde acude todavía y asiste muy contento y disfruta de encontrarse con sus compañeros y sus amigos. “Cuando vamos a las reuniones de padres nos sorprende ver que él se comunica mucho más con sus pares y que habla mucho más que con nosotros.”, observa Elizabeth.

En 2015 se incorporó Volta a su vida. Y a partir de ese momento todo mejoró. Volta es una perra de asistencia: está entrenada para ejercer un rol de apoyo a niños con autismo y ese saber lo adquirió en la Fundación Bocalán. Las terapias asistidas con perros, según lo que promueve Bocalán, tienden a reducir las dificultades y a impactar de manera positiva en el bienestar y la calidad de vida tanto de niños y adultos con autismo, como de sus familias. Desde el primer día que llegó al hogar de Nico, Volta cambió su vida y su manera de relacionarse con el mundo.

“Nos dimos cuenta de que esto era lo que nuestro hijo necesitaba”

Aunque se conoce poco en Argentina, los perros que asisten a personas con autismo en lugares públicos están autorizado por una ley específica. Se trata de la 26.858, de “Derecho de acceso, deambulación y permanencia de personas con discapacidad acompañadas por perro guía o de asistencia”. Esa ley reglamenta la actividad de los perros guía, antes conocidos como lazarillos, que acompañan a las personas ciegas. Por eso, estos animales tienen permitido el acceso a todos los lugares, ya que no son considerados una mascota ni un animal de compañía.

Los perros de asistencia ejercen una función que está reconocida en nuestro país. Son un apoyo para niños con autismo y otras personas con discapacidad. La reglamentación de esta ley está vigente desde 2019 mediante el decreto Decreto 792/2019 y la autoridad de aplicación de esta norma es la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS), donde aseguran que trabajarán en un registro oficial de este tipo de perros.

“Estábamos participando de una reunión de padres de chicos con autismo y llegaron Margarita y Victoria a contarnos sobre la labor de Bocalán”, cuenta Elizabeth y agrega: “Cuando las escuché lo miré a Leandro, el papá de Nicolás, y nos dimos cuenta de que esto era lo que nuestro hijo necesitaba. Iniciamos el proceso de evaluación que exige la Fundación y luego de unos meses nos seleccionaron para que Volta se sumara a nuestra familia”.

“Volta logró que Nico durmiera en su cuarto”

El día en que la perra inició su labor toda la familia Meini salió a caminar por el barrio con ella. Era la primera vez que un animal ingresaba a la casa, nunca habían tenido perros o gatos antes ni sabían cómo iba a resultar la experiencia. La recibieron con una mezcla de emociones: por un lado la alegría y por el otro, la ansiedad.

“Caminamos más de media hora a un paso muy ligero y Nico respondió excelentemente bien. Iba agarrado de Volta y conociendo las calles.”, cuenta Elizabeth. " Así fue como cambió nuestra vida. Antes solo podíamos llevarlo en auto, no caminaba ni una cuadra sin hacer berrinche. Desde que Volta lo asiste logramos que camine, que entre en un shopping, que pueda estar tranquilo y regular su comportamiento en un restaurante. Pudimos irnos de vacaciones y disfrutarlas sin contratiempos. Además, una de las primeras cosas que logró Volta fue que Nico durmiera en su cuarto, acompañado con ella, porque si no dormía en mi dormitorio”, se maravilla Elizabeth.

La familia recuerda con mucha satisfacción el hecho de que Nico comenzara a dormir en su cuarto, que pudiera descansar de corrido sin levantarse, que no estuviera nervioso para las fiestas -en Navidad y Año nuevo Nico sufría mucho el tema de la pirotecnia- y con Volta se van a dormir tranquilos y relajados.

Volta, al igual que todos los perros de servicio, sabe que cuando tiene el chaleco puesto, su uniforme, está “trabajando”. Con este chaleco también se conecta al niño a través de tres anclajes que la sujeta a un cinturón para mantenerlo agarrado, y a su vez lleva dos correas una para él y otra para su madre o padre, que es quien conduce al perro.

Elizabeth recuerda una escena reveladora: “No me voy a olvidar nunca, la primera vez que llevé a Volta a la puerta del colegio a buscar a Nico. Él cuando caminaba atropellaba a todo el mundo y la gente lo miraba mal, el día que fui con Volta vestida con su chaleco, la gente se movía para darle su espacio. Volta hizo visible lo invisible, que era la condición de Nicolás”.

La familia asegura que esos cambios les abrieron un montón de puertas y los alentó. “También como papás eso nos animó a hacer más. Nos animamos a llevarla de vacaciones, nos animamos a subir una sierra, a hacer juegos de aventura en las sierras. Esa fue la primera vez que Nicolas se sacó el arnés y se separó por un ratito de Volta. Se subió a una tirolesa de 400mts de una sierra a la otra, y Volta lo acompañaba”.

Cuando los padres de Nico le quitan a Volta su chaleco ella entiende que ya no es tiempo de trabajar. Vuelve a ser una perra, entonces descansa, pasea y disfruta como un miembro más de la familia. Nico, por su parte, se volvió un niño capaz de asumir y cumplir ciertas responsabilidades frente a Volta: alimentarla, cuidarla y mantener su higiene.

Los perros también se jubilan

Esta historia de amor, cuidado y contención ya llegó a su fin. Porque Nico ya es un adolescente y no necesita tanto de su apoyo pero también porque Volta ya es mayor y merece un descanso. Luego de nueve años de servicio, en una ceremonia celebrada durante la décima entrega anual de perros de asistencia del a Fundación Bocalán, Volta se jubiló. Ella formó parte de la primera jubilación de perros de asistencia entregados a familias de niños con autismo por la Fundación. ¿Y qué significa que la perra se jubiló? Que sigue siendo parte de la familia Meini, pero sin ninguna función especial.

El 2 de abril es el Día de la Concientización sobre el Autismo

Desde el año 2007, cada 2 de abril se celebra internacionalmente el Día de la Concientización sobre el Autismo, por el que se busca darle visibilidad a personas con TEA o CEA y así, mejorar su calidad de vida, para promover su derecho a vivir plenamente como parte fundamental de la sociedad.

Una novedad, que tiene el objetivo de conectar a familias con profesionales, recursos y apoyos en un solo lugar, es el reciente lanzamiento de Autismored, una plataforma digital, global y gratuita enfocada en las Condiciones del Espectro Autista (CEA) que está comenzando a funcionar. Las instituciones que están a cargo del proyecto son el Rotary Club de Montserrat junto a Fundación Brincar, Asociación Argentina de Padres Autistas Apadea (APADEA), el Programa Argentino para Niños, Adolescentes y Adultos con Condición del Espectro Autista (PANAACEA) y Globant .

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